LOGO

Identidad docente feminista : : una co-construcción del concepto a partir de experiencias de resistencias / Tamara Elizabeth Adasme Berríos.

Por: Colaborador(es): Tipo de material: TextoTextoIdioma: Español Editor: Viña del Mar : Universidad de Valparaíso, 2020Descripción: 103 hojas : : il., gráficos + +1 CD-ROMTipo de contenido:
  • text
Tipo de medio:
  • unmediated
Tipo de soporte:
  • volume
Tema(s): Otra clasificación:
  • MMED
Recursos en línea: Nota de disertación: Magíster en Educación para la Inclusión, la Diversidad y la Interculturalidad. Resumen: En Chile avanzar hacia la inclusión educativa es un desafío pendiente. Durante los últimos treinta años, se evidencian diversas iniciativas en políticas públicas; las más recientes, como la ley Zamudio y la ley de Inclusión han sido dirigidas para abordar esta temática. Sin embargo, carecen aún de un real impacto que dé cuenta avances significativosen esta materia. Se ve más bien que aquello se reduce a la visibilización y atención de la diversidad, exclusivamente en términos de cognición y necesidades educativas, pero dejan de lado las referidas al género. Más aún, éstas empapan el contexto educativo de sesgos, tal como indican Matus y Molina (2015), en tanto la formación de profesoras y profesores se constituye desde discursos que abordan la inclusión desde la consideración la diversidad, reduciéndola sólo a la discapacidad y necesidades educativas especiales (Matus y Molina, 2015). Por otro lado, en una sociedad que se caracteriza por contener de manera estructural una serie de desigualdades, avanzar hacia la inclusión, es una necesidad imperiosa. En tal sentido,las manifestaciones surgidas por el movimiento feminista en mayo del 2018, generaron importantes repercusiones en distintos espacios sociales pues la demanda por equidad, en este caso de género, cobró un significado muy particular dadas las brechas que se establecen entre hombres y mujeres. Al respecto, el Informe de discriminación en la escuela de la Superintendencia de educación, señala que, de las 168 denuncias del año 2018, el 4% corresponden a Discriminacción por prejuicio sexual, 4%; Discriminación por embarazo, maternidad y paternidad, 4%; y no existen porcentajes asociados a sexismo y discriminación de género. Al respecto, vale preguntarse cuánto cambiarían las estadísticas si las experiencias de sexismo sistémico y cotidiano fueran denunciadas. Cabe preguntarse por qué, luego de tres años de implementada la ley, aún se observa brecha de género. Más aún, ¿por qué el género no se interpela explícitamente como parte de las acciones de esta educación para el logro de la inclusión en todo espacio educativo? Desde la experiencia como docentes feministas en diversos espacios escolares, esta inquietud apareció para develar la razón de que las temáticas de género tuvieran poca cabida en las escuelas, y más aún, se generara resistencia al plantearlo y resistencia al considerarse profesora feminista. De esta forma surge la idea de trabajar los hechos de resistencia vivenciados por las docentes, en primera instancia desde las integrantes de EDUCAFEM, (feministas por la educación Amanda Labarca), pero posteriormente se amplía a las docentes que habían adquirido la agenda docente feminista realizada por la agrupación antes mencionada. Este proyecto tiene por propósito co-construir un concepto de identidad docente feminista que considere experiencias de resistencias para fortalecer su rol transformador, debido a que esta resistencia puede generar en las docentes no querer alzar la voz frente a un acto de injusticia de reconocimiento y, por lo tanto, puede marcar un distanciamiento entre las demandas sociales actuales relacionadas con la justicia de género, como también la invisibilización de las expresiones o formas de conocimiento que cumplen con cánones de tipo sexista. Si bien este proyecto no se hace cargo de disminuir la resistencia en los lugares de trabajo de las educadoras feministas, este si pretende transformar estos hechos en fortalecimiento para que las docentes identifiquen a partir de una acción participativa, el compromiso político al educar, fomentando el pensamiento crítico y visibilizando el diálogo de las diferencias.
Valoración
    Valoración media: 0.0 (0 votos)
Existencias
Tipo de ítem Biblioteca actual Colección Signatura topográfica Estado Fecha de vencimiento Código de barras Reserva de ítems
Tesis Digital Postgrado Medicina Referencia Tesis MMED A221i 2020 Disponible xxxxds
Total de reservas: 0

Magíster en Educación para la Inclusión, la Diversidad y la Interculturalidad.

Bibliografía: h. 101-104.

En Chile avanzar hacia la inclusión educativa es un desafío pendiente. Durante los últimos treinta años, se evidencian diversas iniciativas en políticas públicas; las más recientes, como la ley Zamudio y la ley de Inclusión han sido dirigidas para abordar esta temática. Sin embargo, carecen aún de un real impacto que dé cuenta avances significativosen esta materia. Se ve más bien que aquello se reduce a la visibilización y atención de la diversidad, exclusivamente en términos de cognición y necesidades educativas, pero dejan de lado las referidas al género. Más aún, éstas empapan el contexto educativo de sesgos, tal como indican Matus y Molina (2015), en tanto la formación de profesoras y profesores se constituye desde discursos que abordan la inclusión desde la consideración la diversidad, reduciéndola sólo a la discapacidad y necesidades educativas especiales (Matus y Molina, 2015). Por otro lado, en una sociedad que se caracteriza por contener de manera estructural una serie de desigualdades, avanzar hacia la inclusión, es una necesidad imperiosa. En tal sentido,las manifestaciones surgidas por el movimiento feminista en mayo del 2018, generaron importantes repercusiones en distintos espacios sociales pues la demanda por equidad, en este caso de género, cobró un significado muy particular dadas las brechas que se establecen entre hombres y mujeres. Al respecto, el Informe de discriminación en la escuela de la Superintendencia de educación, señala que, de las 168 denuncias del año 2018, el 4% corresponden a Discriminacción por prejuicio sexual, 4%; Discriminación por embarazo, maternidad y paternidad, 4%; y no existen porcentajes asociados a sexismo y discriminación de género. Al respecto, vale preguntarse cuánto cambiarían las estadísticas si las experiencias de sexismo sistémico y cotidiano fueran denunciadas. Cabe preguntarse por qué, luego de tres años de implementada la ley, aún se observa brecha de género. Más aún, ¿por qué el género no se interpela explícitamente como parte de las acciones de esta educación para el logro de la inclusión en todo espacio educativo? Desde la experiencia como docentes feministas en diversos espacios escolares, esta inquietud apareció para develar la razón de que las temáticas de género tuvieran poca cabida en las escuelas, y más aún, se generara resistencia al plantearlo y resistencia al considerarse profesora feminista. De esta forma surge la idea de trabajar los hechos de resistencia vivenciados por las docentes, en primera instancia desde las integrantes de EDUCAFEM, (feministas por la educación Amanda Labarca), pero posteriormente se amplía a las docentes que habían adquirido la agenda docente feminista realizada por la agrupación antes mencionada. Este proyecto tiene por propósito co-construir un concepto de identidad docente feminista que considere experiencias de resistencias para fortalecer su rol transformador, debido a que esta resistencia puede generar en las docentes no querer alzar la voz frente a un acto de injusticia de reconocimiento y, por lo tanto, puede marcar un distanciamiento entre las demandas sociales actuales relacionadas con la justicia de género, como también la invisibilización de las expresiones o formas de conocimiento que cumplen con cánones de tipo sexista. Si bien este proyecto no se hace cargo de disminuir la resistencia en los lugares de trabajo de las educadoras feministas, este si pretende transformar estos hechos en fortalecimiento para que las docentes identifiquen a partir de una acción participativa, el compromiso político al educar, fomentando el pensamiento crítico y visibilizando el diálogo de las diferencias.

Dirección de Bibliotecas y Recursos para el Aprendizaje

Universidad de Valparaíso

Normativas

  • Blanco 951, Valparaíso, Chile.

  • 56-32-2603246

  • Política de privacidad